Teniendo en cuenta la dificultad actual con respecto a la obtención de un trabajo estable, debemos hacer hincapié en que la inserción en el mercado laboral, especialmente si éste está relacionado con el ámbito de la comunicación, no es una tarea fácil y que por ello debemos ser constantes y no renunciar a la primera de cambio. Dado que nuestro país se encuentra en una situación económica de crisis, la bolsa de trabajo ha disminuido considerablemente, mientras que las personas que salen de las universidades y de los grados de formación profesional no ha hecho más que aumentar.
Actualmente, una persona a la hora de enfrentarse a un reto en el mundo de la comunicación debe estar comprometida con la causa que trata, así como debe mantener una actitud receptiva, siendo responsable y paciente, aportado ideas y datos constantemente a la organización, estimulando así la creatividad y la innovación siempre que sea posible.
La licenciatura de Publicidad y Relaciones públicas es una formación que abarca campos de muchos otros ámbitos, como es ahora el diseño gráfico, la producción de la comunicación publicitaria, una pequeña rama de periodismo, planificación y estrategias de mercado… Esto provoca, desde mi punto de vista, que trás terminar la licenciatura, los estudiantes en esta carrera sabemos muchas cosas a grandes rasgos y muy pocos datos de manera especializada. El problema surge cuando queremos lanzarnos a trabajar. Dado que la experiencia que podemos tener las personas recién salidas de la carrera no suele ser de gran ayuda para nuestros currículum, en muchas ocasiones se opta por contratar a otra persona que carezca de título universitario pero conozca el trabajo al que se va a dedicar dado que lo ha realizado con anterioridad. Esta desventaja provoca que personas menos cualificadas regenten puestos de trabajo de un calibre que podría ser manejado por otro tipo de profesional de forma más efectiva.
Tal como concebimos la vida los jóvenes de hoy, el trabajo es un medio para vivir mejor, y no una forma de vida. Vivimos para disfrutar. Esto no supone más que el reto de enfrentarse día a día con aquello a lo que te dedicas, y no por ello nace la precariedad.
Personalmente considero que el mercado al que hay que abrirse ahora mismo, no es otro que el mundo. El mundo es un mercado inmenso, no debemos obcecarnos en quedarnos en España. Porque en España nos han formado y no nos contratan porque carecemos de experiencia, pero tampoco nos han dado todas las facilidades necesarias para abrir nuestras fronteras al mundo, dado que el inglés de los españoles deja mucho que desear.
Hay infinidad de retos a los que se enfrenta una persona con objeto de conseguir un puesto de trabajo estable y que le permita llevar una vida acomodada, y como conclusión podríamos decir que hay dos opciones: o destacas o estás en el lugar y en el momento adecuado. Dado que la segunda opción es bastante improbable nos queda la primera, destacar frente a los demás. Ser competitivos.
Me parece que esta es una cualidad que podría destacar en mí ya que me considero una persona con convicciones fuertes y con aspiraciones que espero conseguir y superar algún día. Si para ello he de moverme de aquí para allá,incluso al extranjero, lo haré sin nungún tipo de atadura e impedimento. Puesto que el mejor momento para viajar, aprender y vivir nuevas experiencias, es ahora, que nada me ata y aun estoy desarrollándome y absorbiendo cosas. Por eso, siempre llevo conmigo la típica frase " de la escuela de la vida es de donde más aprende uno por sí mismo".
Me gustaría recalcar, a modo de conclusión, que no hay nada como aprender y disfrutar haciéndolo, y cuando te dedicas a lo que realmente te gusta se nota y se plasma en el trabajo realizado. Si no es posible dedicarte a lo que quieres no debes rendirte, sino seguir buscando sin cesar hasta que aquello a lo que dediques no sea un mero trabajo para poder comer y vivir, sino un medio para completarte como persona y estar en constante formación.
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